Pausa Activa es una actividad física realizada en un breve espacio de tiempo en la jornada laboral, orientada a que las personas recuperen energías para un desempeño eficiente de trabajo, a traves, de ejercicios que compensen las tareas desempeñadas, revirtiendo de esta manera la fatiga muscular y el cansancio generado por el trabajo.
¿Por qué es importante?
Numerosos estudios, mayoritariamente llevados a cabo en países anglosajones, demuestran una clara correlación entre la práctica de actividad física en el lugar de trabajo y la mejora de la productividad en las empresas. Ello principalmente por la contribución que hace esta herramienta a la prevención y disminución de los costos asociados a “trastornos musculo-esqueléticos”(TME), provocados por problemas de salud del aparato locomotor, es decir, músculos, tendones, esqueleto, cartílagos, ligamentos y nervios.
La práctica de gimnasia laboral incluye una serie de ejercicios compensatorios, con distinta frecuencia y duración, según el tipo de trabajo, los cuales permiten fortalecer y aumentar la resistencia del aparato locomotor, reduciendo así la fatiga y ayudando a prevenir enfermedades músculo-esqueléticas.
MATERIAL DIDÁCTICO
Compartimos con la comunidad de Elige Vivir Sano, un volante desarrollado por la SEREMI de Salud de Los Ríos, que pueden imprimir en sus oficinas con una rutina de gimnasia laboral para seguir.
OTRAS RECOMENDACIONES
Cuidar la postura en el trabajo es clave para evitar sufrir tendinitis, lesiones lumbares o cervicales. En este nuevo artículo te entregamos 8 consejos para prevenir.
Considera una distancia entre la pantalla y la cara de 55 cm. como mínimo.
Fíjate que los brazos formen un ángulo recto, para que cuides la posición de los codos.
La pantalla del computador debe estar frente a tus ojos, para evitar torcer el cuello.
Preocúpate de la altura de la mesa, es muy importante para apoyar bien los brazos.
El asiento tiene que ser acolchado con bordes suaves para una mejor circulación de las piernas.
Mantén siempre la espalda recta, pegada al respaldo de la silla (ojalá haya un cojín lumbar incorporado, con diseño ergonómico).
Los pies deben estar siempre apoyados sobre el piso.
Haz pausas cortas para elongar y relajar los músculos.
Fuentes: ACHS, SEREMI Salud Los Ríos